El mundo de los No-comerciales

Imaginaos que buscando por Internet, os aparece una oferta de trabajo tan extraña, que no podéis hacer menos que apuntaros. Imaginad que en el texto dan a entender tareas propias de almacén, para luego más tarde en el cuerpo del mensaje de la oferta, hablar de marketing directo. Imaginad que el sueldo oscila entre 1100 y 2800 al mes. Y Sobre todo, imaginad que en ningún momento pone que empresa es.
Imaginad que os seleccionan, os hacen llamar a un número de teléfono. En la llamada habláis con una señorita, os pregunta nombre y móvil, quedáis para una entrevista, y casi se dispone a colgar cuando debido a que vosotros le preguntáis, os dice que la empresa es algo así llamado comunitel. Imaginad que mas que nada por curiosidad os presentáis en el lugar a la hora indicada. De momento recapitulemos, han pasado varios días, y aun no sabéis a donde vais, ok.
Llegáis a la entrevista, el lugar es un bajo en el centro de la ciudad. Os paráis delante, sabéis que es allí porque el numero coincide, pues por otro lado, ningún cartel, ninguna señal de nombre de empresa, ni siquiera de que dicho bajo lo sea. Entráis. La señorita os pregunta si venís por la entrevista. Os sentáis en la sala de espera. Aun, no sabéis que empresa es. Estando en la sala de espera, imaginad que no tenéis mucho más que hacer, que observar. Sala pequeña, 8 sillas, una mesa en el medio. 4 revistas, una coure, una de dietética, la revista Emprendedores y otra sobre moda. Miráis a la pared, un único cuadro. En el, aparece un hombre, una mujer, y un niño. Se encuentran en un parque o algo similar lleno de árboles. Como no, el niño en medio, dándole la mano a cada uno de ellos. Debajo, la siguiente frase: “Nuestros hijos no necesitaran muchas explicaciones si nosotros somos un buen ejemplo”. En efecto, la cosa pinta mal. No imaginamos en exceso sobre el cuadro. Solo 2 puntos: 1, Como no la familia perfecta, padre madre e hijo de la mano, lógicamente, no iban a poner a 2 lesbianas, y 2, si yo tengo un hijo, y soy tan buen ejemplo que el nunca me pide ninguna explicación, o el niño es estúpido, o yo llevo años trabajando en ese sitio.
Imaginad que os llama la señorita, os sentáis en su mesa. Os pregunta el nombre y algunos datos ( ya van dos veces). Aun no sabéis que empresa es. Lo apunta en el pc, y os da una hoja, para rellenar, donde aparecen todos los datos, nombre, teléfonos, direcciones, DNI, estado civil, hobbys, aspiraciones, y 2 calificativos sobre vuestra persona. Rellenáis el papel con vuestros datos ( ya van 3 veces) se lo dais a la chica y si amigos, aun no sabéis de que es la empresa. Por fin, aparece un joven trajeado, os saluda y os da la mano, apretón forzado y sin muchas ganas. Mientras subís unas escaleras, el joven os pregunta si habéis podido aparcar bien. En efecto, comienza el juego. Os lleva a un despacho amplio, os sienta en su mesa, al fondo del despacho, otra mesa con otro chico tecleando en el ordenador. El chico que os tiene enfrente os suelta la parrafada. En ningún momento nombre a la empresa, simplemente se limita a decir que se dedican al marketing directo, y que empresas como Telefónica y ono, son clientes suyos. (Donde quedo el trabajo de almacén ofertado?) No habla de horarios ni sueldos, nada. Simplemente se limita a explicar lo mucho que podéis subir en la empresa, habiendo 3 niveles. El básico, donde vosotros entráis, luego pasáis a formar a los inútiles nuevos que entran, y luego pasáis a dirección. Después de esto, el os dice que acaba de pasar el mismo, al tercer nivel. Acaba su charla, y os comenta que esa misma tarde, tengáis el móvil conectado, a las 18 en punto, os llamaran, si habéis sido descartados, tendréis suerte, si habéis sido seleccionados, pasareis un día entero de prueba con un supervisor. Así que, os dais cuenta de que como no preguntéis, sorpresa!! Aun os vais de ahí sin saber que empresa es o a que se dedica. En efecto amigos míos, no habéis entendido nada de la oferta. Imaginad que le preguntáis, y hacéis referencia a que el anuncio no estaba muy claro. Giro inesperado, se activan las alarmas. El joven de la mesa del fondo se da por aludido: “el anuncio si esta claro, porque lo he escrito yo” (convincente, si señor)
Imaginad que ahora habláis con el joven B, mientras el joven A, mira expectante. Discutís sobre el anuncio. Hablaba de almacén, y ahora resulta que no. No se hablan de horarios, el sueldo es muy general, no se hablan de faenas, y le decís que para vuestro gusto, se da información redundante, como el hecho de que haya contrato desde el primer día (faltaría más). El joven B os pregunta el nombre, como no, técnicas de acercamiento, y os tutea. Os suelta una charla que tampoco entendéis. Simplemente os llama la atención una cosa. El joven B, en un alarde de importancia en pos de la empresa, explica que el también es de vuestra misma comunidad (porque imaginad que sois de fuera) y que trabajaba allí de policía, es mas, lo dejo por esa oferta. Lógicamente no os creéis nada. Y en un último intento de catalogación, le decís al joven B, que sabemos que no le va a gustar, pero que por lo que vemos, las funciones serian de comercial. En efecto, habéis dado en el clavo, al joven B no le ha gustado eso. Retoma la charla, seguís sin entender nada. (Daros cuenta de que aun no sabéis que empresa es).
Así que como no tenéis mas ganas de discutir sobre la claridad redactora del joven B, os disponéis a marcharos. Eso si, le preguntáis el nombre de la empresa, el joven B poco menos que se niega a darlo, pues dice que ellos no representan a todos sus clientes. Vosotros le replicáis que queréis saber para qué empresa trabajaríamos, al final suelta un nombre, DSMAX. Lo escribís, os despedís de ellos diciendo que ok, que buscareis información, pues os gusta informaros. El joven A, me recuerda que tenga el móvil encendido (oh vamos, no van a llamaros) y mientras os acompaña a la puerta, os dice que el también empezó así, cosa que suena a: a la larga te acostumbraras.
Imaginad que llegáis a casa, indignados, y que gracias a esto llamado Internet, ds max no aparece en ningún sitio. Comunitel, que era la empresa dicha por la señorita en la primera llamada telefónica, ni siquiera es una empresa sino una campaña de tele2. Investigando, dais con otro nombre, Actitud Leader. Y ahora si, por fin tenemos un nombre concreto, lo buscamos, y encontramos numerosos foros y blogs, donde los califican de estafadores. Bien!!, Por cierto en uno de los blogs, alguien que hizo la supuesta prueba del día entero son supervisor, se resume a ir por la calle picando timbres, haciéndose pasar por comerciales de telefónica. Bravo, no sois comerciales no, ni eso sois. Eso no queda ahí, volvemos a casa y miramos el anuncio, vemos que si hablaba de almacén aunque el joven B dijera que no. Recuperamos el teléfono y volvemos a llamar. Le decíamos a la señorita que acabamos de estar allí y realizada una entrevista. Le explicamos que el joven A nos ha dado un nombre de empresa pero al buscar información no aparece nada. Le preguntamos el nombre a la señorita por 4 vez, nos dice que Comunitel. Después de una larga charla, llegamos al nombre de nuevo de Actitud Leader, imaginad que se os enciende la bombilla. Lanzáis vuestra última pregunta: Quedamos que el nombre de la empresa es Actitud Leader y que por lo tanto toda información y opinión que aparezca en Internet sobre ellos, es información sobre vosotros? Nos responden que si. La chica intenta explicarnos que ella lleva 6 años con ellos, pero lo siento, no hay nada más de que hablar…